Su corazón llovió después de estar latente,
como el preludio de una tormenta de verano.
Con olor a asfalto que necesita dejar correr el agua por sus aceras
limpia, lo que una vez seco volverá a ser lo mismo.
Electricidad en pies y manos,
en un ciclo cerrado.
Instantánea de una espalda,
ir y venir de manos
Vista atrás para ver el origen de la calma,
despúes de la tormenta,
es la sonrisa del mar.