Aunque a priori pueda parecer que en un cartel en el que figura un cuasi consagrado grupo de electrónica como Asian Dub Foundation, serían los amos y señores, en el caso del Festival Planet Babylon la gente prefirió a un grupocon nombre de dudoso gusto (La Pegatina), pero he de reconocer, que con un buen directo y muy divertidos o a su compatriota Bongo Botrako conocido por canciones con alusiones a cierto molusco. La verdad es que, aunque yo soy fiel a Asian, puedo reconocer el gancho de los otros dos grupos.
La aunténtica odisea estuvo después del concierto. Rivas futura, donde se celebró el festival, no conoce de comunicaciones, de chalets cadáver víctimas de la fiebre de la construcción, sí. Para que os podáis hacer una idea, a las 12:30 de la noche cerró el metro y los búhos brillaban por su ausencia.
Con este panorama, tuvimos que esperar a que apareciese un bus fantasma, que fue víctima de la furia de festivaleros amotinados, que ya habían dejado en la carpa todo su buen rollo y euforia y sólo querían llegar a un sitio con más personas que chalets. Un conductor de autobús desbordado pero sereno y la guardia civil escoltando nuestro autobús. Así llegamos cuatro horas después de que comenzase nuestra odisea. Rivas never again.